Las Contracturas Musculares son contracciones musculares sostenidas desagradables que pueden afectar desde deportistas hasta personas sedentarias. En FisioClinics Barcelona sabemos que las mismas generalmente son inofensivas, sus causas son a menudo fáciles de detectar al identificar los signos y síntomas con que se presenten, y al obtener su origen podemos ponerle fin a éste malestar. Continúa leyendo y conoce más sobre esta afección que a muchos aqueja.
¿Qué son las Contracturas Musculares?
Las Contracturas Musculares se tratan de una contracción espontánea, involuntaria y permanente de algunas fibras de un músculo. Pueden aparecer en cualquier músculo del cuerpo, sin embargo, son más frecuentes en los músculos posturales, como en la cervical, los hombros (trapecios) ya lo largo de toda la columna (para-vertebrales).
Las Contracturas Musculares (Puntos de Gatillo Miofasciales) producen dolor, incomodidad y muchas veces limita los movimientos, pudiendo ser en la mayoría de los casos fácilmente percibida cuando se coloca la mano sobre el músculo afectado ya que se nota una parte más dolorida y tensa a la palpación.
Este tipo de lesión muscular es muy común en quien pasa mucho tiempo trabajando en oficinas en la misma posición por mucho tiempo y generalmente, no practica ninguna actividad física de forma regular y a diferencia de los calambres o espasmos musculares la contracción tarda más tiempo en desaparecer (incluso días).
¿Cuáles son los síntomas de una Contractura Muscular?
Los síntomas de una Contractura Muscular son dolor local del músculo afecto (que a veces también puede irradiar), dificultad para estirar, limitación de la amplitud de movimiento y, a veces, pérdida de fuerza. Algunos de los síntomas que indican la presencia de una contractura muscular son:
- Dolor y molestias especialmente si es en el cuello, cervical, muslo, espalda, pantorrilla y glúteo.
- Presencia de una parte del músculo más dolorida y dura a la palpación, similar a una bolita o nudo.
- Dificultad en estirar el músculo afectado debido a la presencia de dolor.
- Dificultad para mover la articulación o el miembro cercano al músculo dolorido.
- Sensación de escozor interno.
- Dependiendo de la musculatura afectada, pueden aparecer otros síntomas como dolores de cabeza, mareos ocasionales, sensaciones de hormigueo o adormecimiento en dedos de las manos (parestesias).
¿Qué causa los Puntos de Gatillo Miofasciales?
Las causas típicas de las Puntos de Gatillo Miofasciales o contracturas musculares pueden incluir estilo de vida y características físicas que afectan el balance fisiológico de la fibra muscular, entre las causas más destacables encontramos:
- Cansancio de la fibra muscular afectada, como consecuencia de mal entrenamiento.
- Estrés.
- Cansancio de la fibra muscular afectada, como consecuencia de una inadecuada alimentación (falta de glucógeno en el músculo).
- Posturas no anatómicas repetitivas y forzadas; por ejemplo, sujetar el teléfono con la oreja y el hombro.
- Rigidez muscular y falta de flexibilidad.
- Estiramiento brusco de un grupo muscular (el músculo como defensa se contrae).
- Golpes o impactos directos a la musculatura.
- Sobrecarga muscular continuada.
- Cambio fisiológico muscular debido a la vejez o el embarazo.
- Posición mantenida durante un sueño desfavorable.
¿Cómo se realiza el diagnóstico médico de las Contracturas Musculares?
Es importante un diagnóstico correcto de la lesión para no confundirlo con otras lesiones musculares, pues el tratamiento es distinto. Se aprecia dolor a la palpación con un endurecimiento superior al normal. En la palpación transversal se produce un pequeño salto con desplazamiento de la fibra muscular produciendo dolor. Presencia de retracción muscular (acortamiento).
Las Contracturas Musculares o Puntos de Gatillo Miofasciales se diagnostican mayormente por la presencia de músculos tensos o rígidos que son muy sensibles al tacto y no requiere estudios imagenológicos ni exámenes de sangre que puedan ayudar a diagnosticar esta condición. Sin embargo, en casos especiales que presenten otra sintomatología asociada como la irritación de un nervio, como sucede en la espalda, una imagen por resonancia magnética (IRM) puede ser necesaria para determinar la causa de dicha irritación.